Halloween con La mosca difunta de La ChicaCharcos

La ChicaCharcos es una de esas propuestas escénicas (Concierto de historias) que no había buscado y que está siendo el descubrimiento de la década. Oigan, es que, como que no termino de exprimir todo lo que ella y la Katiuskas Band puede ofrecer.

Escucho una y otra vez -sí, sí, cuando estoy sola también, no se crean que es cosa de chaveas esto, nada de eso, ahí no se agota- el disco de “Un elefante en mi lavadora” y me encuentro ante la difícil elección de qué tema escuchar si voy con prisa y solo me da tiempo a uno (lo habitual con estas maternidades que nos gastamos, ¿que no?).

NOTA: Me está saliendo un tono vallekano, que lo flipas! ¿Será que estos días están las compañeras de Herstóricas paseando por el barrio, y me he vuelto nostálgica) 

Y como estamos de Halloween pues he optado por el temazo de “La mosca difunta”, que al ritmo de Rock&Roll termina su vida por una intoxicación de ajo. Y es una fiesta!! Como en México, donde comprenden que no hay ser vivo que no vaya a morir y que el día de los muertos, es el momento en que se abre la puerta entre ambos mundos y nos abrazamos y recordamos a los que ya no están.

Contamos en Granada con Barbara Fiore Editora, que también tendrá su stand en Little Chavea, y que ha editado títulos tan chulos como: El pato y la muerte, o la reciente díada: “Soy la Vida” y “Soy la Muerte”, con los que hemos disfrutado de la excelente (por la calidad) oportunidad de hablar con nuestros chaveas del miedo hacia lo desconocido, en particular, a lo que pasa cuando alguien querido se muere o lo que pasará el día que uno mismo deje de existir.


Por aquí, no se pierdan el taller que dará Ruth de Planeta Calarú y Rubén, su ilustrador del álbum: Igor, el ogro, el sábado 24, a las 16h en la Sala Clío. Una oportunidad para acercarnos al tema de la muerte, como la posibilidad de narrar la nada, la inexistencia, y el camino que lleva a ella. Pero como ya sabéis, en familia y ¡a lo bestia!

Y pensando en Halloween, pues me he acordado de cierto año, allá por los 90 (Oh My God!!!OMG!!!), en el que mi muy mejor amiga y yo, diseñamos y fabricamos disfraces para toda la pandilla inspirándonos en “Pesadilla antes de Navidad” (Tim Burton). La que suscribe eligió la muñeca de trapo, rota y remendada. El porqué es otra historia, que puede que algún día les cuente en lalectoraprofesional.com.

El caso es que he recordado el entusiasmo de semanas creando, maravilladas ante la elección de tejidos, la construcción en escayola del cerebro del científico o la búsqueda de sacos de papata que pudieran tapar el cuerpo de mi ex de casi 2 metros de alto y otro tanto de ancho. Disfrutamos tanto en el proceso creativo, en lo que soñamos, en las posibilidades que se abrían que la fiesta de Halloween en un bar fue absolutamente decepcionante.

Todo esto me deprime cual día frío y gris de otoño, pero a la vez sube los músculos de las comisuras, porque sabe, a ciencia cierta, con la mano en el fuego y sin quemarse, que La ChicaCharcos nunca defrauda!!! Sé que llevamos meses preparando Little Chavea y que lo vais a pasar en grande, sin rastro de dudas!! Y sé que el único miedo que tengo es…cuando llamen esta noche una pila de chaveas pidiendo truco o trato, y se me hayan acabado las “cositas” (never chuches) para el trato!!